Trasobares y más bares
Escalar, reír, compartir anécdotas y vivencias, empatizar, escuchar y hablar con el corazón…

Escapada a Trasobares para escalar algo de deportiva sin presión, sin juicios, sin prisas…escalada de relax en una escuela con varios sectores para todos los gustos y grados. Vías desde IV+ hasta 8° al sol, a la sombra, más largas, más cortas, placas, desplomes…y con el río cerca para refrescarte o mejor aún, en la piscina del camping que se está genial disfrutando de una cerveza bien fría.
La roca es peculiar, muy abrasiva y adherente, con agujeros de todos los tamaños y regletas. La verdad es que es una escalada agradecida y segura debido a la buena equipación de las vías.
La escalada deportiva no es la terapia vertical que más me motiva, prefiero las tapias largas y desequipadas, aunque tengo que reconocer que me divertí bastante dando «pegues» a un par de vías.
Tres 6a+ a vista plaqueros y técnicos y un par de 6b desplomados (mi peor enemigo; el desplome) fue la pequeña pero gratificante cosecha que me lleve de este bonito rincón aragonés.
Como siempre, el trato y la cordialidad de Rosa, Isra y Diego, guardianes del albergue de Calcena y del Camping de trasobares fue de 10.
Un día y medio de con Oscar me ha vuelto a recordar el significado de «compañero de cuerda» viviendolo desde la amistad y el respeto mutuo.


